¿Un cachorro de 6 meses puede preñar a una perra?

Para responder a la pregunta que encabeza el artículo es fundamental saber a qué edad un perro macho es fértil. Y lo cierto es que no podemos poner una edad exacta, ya que hay grandes diferencias según el tamaño del ejemplar:

• Perros pequeños: los perros de talla pequeña o mini alcanzan la madurez sexual mucho antes que los de razas grandes o gigantes. Terminan antes su crecimiento, de ahí que también a una edad más temprana estén listos para reproducirse. Podemos fijar esta edad en unos 5-6 meses.
• Perros medianos o grandes: los perros más grandes tendrán que llegar hasta unos 9 meses o más para poder reproducirse.

Puede servirnos de guía el momento en el que comienzan a orinar levantando la pata. En conclusión, dependiendo del cachorro que tengamos sí podría preñar a una perra a edad tan temprana como los 6 meses. Por este motivo, si en el hogar conviven machos y hembras o nuestro ejemplar puede vagar sin vigilancia, debemos saber que la consecuencia puede ser el nacimiento de una camada no deseada de cachorros.

Ahora que hemos visto cuándo un perro macho puede aparearse, podemos saber si nuestro cachorro está ya listo para la monta. Los perros macho no tienen un periodo de celo como el de las hembras, sino que estarán siempre disponibles una vez que alcancen la madurez sexual. Por tanto, un perro puede montar y preñar a una perra a los 6 meses o más. Solo necesitan detectar la presencia de una perra fértil, es decir, que se encuentre en la etapa receptiva de su ciclo o, como popularmente se dice, en celo.

Signos de alerta

Gracias a su muy desarrollado sentido del olfato, la perra puede estar muy lejos y, aun así, ser detectada por el macho, que sentirá el impulso de ir a buscarla. En casa podemos percibir que el perro está intranquilo, que llora, que intenta fugarse del hogar o escapar durante los paseos, etc. Además, hay que tener en cuenta que más de un perro va a percibir el celo de la hembra, con lo que es posible que se den peleas entre ellos y que el resultado, por lo tanto, sean heridas de mayor o menor gravedad.

Si sospechamos que nuestro cachorro ha alcanzado la madurez sexual, debemos extremar las precauciones para evitar el nacimiento de camadas no deseadas. Pero no solo por eso, pues, como hemos visto, que nuestro perro detecte una perra en celo puede llevarlo a escapar, perderse, sufrir accidentes, enfermedades de transmisión sexual (como el tumor venéreo transmisible) o lesiones por el enfrentamiento con otros machos.

Si tenemos dudas sobre la madurez sexual de nuestro ejemplar, podemos consultarlo con el veterinario. Cabe anotar que la aparición de líquido en la punta del pene del perro (esmegma) o la monta de objetos o personas no tienen por qué significar que está listo para reproducirse. En el primer caso, el esmegma es el resultado de un acúmulo de células muertas y suciedad. Solo si el perro se lame mucho, parece molesto o presenta alguna dificultad para orinar podemos pensar que el líquido se debe a una infección que tendrá que tratar el veterinario. Respecto a la monta, los perros, tanto machos como hembras, pueden montar sin que tenga relación con la reproducción, por ejemplo a modo de juego.

Ahora que sabes que un cachorro de 6 meses puede preñar a una perra, con independencia de la edad, debemos tomar medidas para evitar la reproducción descontrolada, sobre todo si en el hogar va a convivir con hembras enteras, es decir, todavía no esterilizadas. Esto pasa por hablar con el veterinario para que nos diga cuáles son las opciones que nos recomienda para nuestro caso concreto.

Hay que recordar que no hacer nada más que intentar mantenerlo separarlo de las perras no es una medida muy segura. El instinto reproductivo es muy fuerte y los perros podrían llegar a escaparse por lugares insospechados con tal de cumplirlo. Por tanto, las medidas de las que disponemos son las siguientes:

• Castración/esterilización. En general, los veterinarios nos recomendarán esterilizar a nuestro cachorro hacia los 6-9 meses, en función de sus características. Le solemos llamar esterilización a lo que, en realidad, es una castración, esto es, la extracción de los testículos del animal. De esta forma, no podrá reproducirse, no se estresará por no poder hacerlo ni sufrirá ninguna de las enfermedades que se relacionan con las hormonas sexuales. La esterilización propiamente dicha sería la vasectomía, una intervención que no suele realizarse en los perros y que tan solo impediría el nacimiento de camadas, pues el perro seguiría reaccionando ante las perras en celo, con lo que mantendríamos el riesgo de fuga y todos los problemas asociados. Por ello, un perro esterilizado podría querer montar aunque no lo haya hecho antes, un perro castrado a una edad temprana no desarrollará este instinto.
• Implantación de un dispositivo. En la actualidad, existe otra opción que es la implantación de un dispositivo bajo la piel que impide la reproducción durante unos meses. En cualquier caso, si el perro no está destinado a la cría, la opción más recomendable, en general, es la castración en el momento que considere el veterinario.

No lo dudes y consulta a tu veterinario antes de que tu cachorro cumpla los 6 meses para valorar la castración lo antes posible, ya que es la medida más eficaz para que un perro de 7, 8 o 10 meses no preñe a una perra.

Este artículo es meramente informativo, en TodoPerros.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu gato a un centro veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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