Mi perro no duerme y está inquieto: causas y qué hacer

En primer lugar, ante un perro que no duerme y está inquieto, lo principal es prestarle atención porque su incapacidad para descansar tiene que deberse a algún motivo. Para descubrirlo debemos ir de lo más sencillo y evidente a lo más complejo, que necesitará la intervención del veterinario.

Así, cuando a nuestro perro le cuesta dormir, lo principal es revisar el lugar donde está durmiendo, tanto la cama como la estancia, pues su inquietud podría deberse a una cama incómoda o mojada, unas temperaturas muy altas o muy bajas, corrientes de aire o un exceso de estímulos. Por ejemplo, fuertes ruidos, trasiego de personas o de otros animales, luces fuertes, etc.

Fijarnos en el perro nos ayudará a encontrar el desencadenante y poder corregirlo. Puede ser tan sencillo como cambiar la cama, apagar la luz, separar al perro de una ventana o modificar la temperatura del cuarto. Puede que te interese conocer la "Temperatura corporal de un perro", aquí.

Pero que un perro esté muy inquieto y no pare de moverse no siempre se debe a una cuestión tan sencilla de resolver como cerrar una ventana o poner otra cama. Lo habitual es que esconda problemas más complejos, como el estrés. Los perros pueden padecer estrés por muy diferentes motivos.

Por ejemplo, este puede surgir ante la falta de estímulos y el aburrimiento, pues los perros necesitan actividad física y mental a diario. También es habitual que aparezca ante situaciones que supongan grandes cambios, como puede ser la muerte de un familiar o una mudanza. En este punto, los cachorros y, en general, cualquier ejemplar recién adoptado, suelen sufrir estrés mientras se adaptan a su nuevo entorno.

Si sospechamos que el estrés es la causa de los problemas de sueño de nuestro perro, debemos intentar identificar el desencadenante concreto para eliminarlo o contrarrestarlo en la medida de lo posible. Por ejemplo, conviene introducir los cambios poco a poco y podemos ayudarnos de feromonas tranquilizadoras. Si a nuestro ejemplar le faltan estímulos, tendremos que proporcionárselos. En el último apartado del artículo veremos más medidas que pueden facilitar el descanso de nuestro perro.

Por último, cabe señalar que no siempre es fácil encontrar el origen del estrés. Por este motivo, si nuestro perro está inquieto y no duerme, lo recomendable es acudir al veterinario para que descarte primero problemas físicos.

Un perro que carece de las oportunidades necesarias para practicar ejercicio acabará por desarrollar estrés que, como hemos dicho, puede causarle inquietud y llegar a afectar al sueño. Hablamos en este otro apartado en concreto de la actividad física por su gran importancia. Especialmente en perros de razas pequeñas o en los más grandes que viven en el exterior todo el día o casi todo, todavía existe la creencia de que no requieren demasiada actividad. Pero no es cierto.

Un perro mini no puede permanecer toda la vida en el interior de un piso, igual que un perro tiene que salir a pasear aunque viva en un terreno enorme porque, cuando lo haya recorrido por entero, se aburrirá y necesitará más estímulos físicos y mentales para evitar el estrés y los posibles problemas de sueño.

Por lo tanto, si sospechamos que la falta de actividad puede estar detrás de la inquietud nocturna de nuestro perro, debemos ponerle remedio implantando paseos diarios, juegos, ejercicios e interacción con congéneres, siempre adaptándose a las características de cada perro.

Si nuestro perro está entero, es decir, sin castrar, va a estar receptivo a la acción de las hormonas sexuales. Esto implica que las hembras tendrán el celo y que, tanto ellas como los machos, mostrarán inquietud e incluso protagonizarán intentos de fuga para encontrar pareja reproductiva. Esto genera una situación de estrés que afecta tanto a machos como a hembras.

Si tu perro no para de dar vueltas por la noche, yendo de su cama a las potenciales salidas, y está sin castrar, es probable que su inquietud se deba al celo. La solución definitiva en estos casos pasaría por la castración. El veterinario será quien nos informe de las opciones posibles.

Otro de los motivos que explica por qué mi perro no duerme y está inquieto es por enfermedades. Múltiples patologías pueden afectar al correcto descanso del perro. Por ejemplo, un trastorno digestivo puede llevar a que el animal pase la noche pidiéndonos salir porque tiene que defecar. También cualquier dolor puede mantenerlo inquieto y sin descansar, al igual que molestias que provocan prurito, como las alergias o la presencia de parásitos externos.

Como vemos, la falta de descanso sería un signo clínico inespecífico, es decir, compartido por múltiples enfermedades. Por este motivo, si el perro no duerme y mucho más si detectamos algún otro signo clínico (picor, dificultades para moverse, diarrea, vómitos, etc.), debemos acudir al veterinario. Este profesional examinará al perro, nos hará preguntas y realizará las pruebas necesarias para llegar a un diagnóstico, que será lo que determine el tratamiento más adecuado.

El síndrome de disfunción cognitiva es un trastorno degenerativo que afecta a los perros de edad avanzada, provocando signos clínicos como desorientación, eliminaciones en el interior del hogar, olvido de órdenes básicas y rutinas, retraimiento, etc. Entre estos signos está también un cambio en los patrones de sueño, que lleva a estos perros a dormir más de día, pero menos durante la noche, que pueden pasar muy inquietos. De ahí que nos preguntemos por qué mi perro está muy inquieto y no duerme.

Es un trastorno similar a la enfermedad de Alzheimer en los humanos. No tiene cura, pero sí se puede tratar para intentar controlar la sintomatología y frenar su avance. Por ello, si sospechamos que nuestro perro mayor padece este síndrome, tendremos que acudir al veterinario. No todos los problemas de los perros de edad avanzada van a ser por la disfunción cognitiva, pero todos requieren diagnóstico y tratamiento.

Ahora que ya hemos repasado las principales causas de por qué mi perro no duerme y está inquieto, vamos a ver qué hacer.

Hemos visto que cómo tranquilizar a un perro inquieto por la noche va a depender mucho de la causa que esté detrás de la inquietud, pero hay algunas medidas generales que podemos adoptar en casa para favorecer el descanso de nuestro perro y que siempre serán útiles para mejorar su bienestar:

• Realizar actividad física todos los días: por supuesto, para el bienestar de todos los perros son imprescindibles los paseos diarios, adaptados a sus características, pero, también, los juegos que estimulen su movimiento, como el típico de recoger y devolver la pelota, o su inteligencia, como las actividades de rastreo en las que pueden encontrar distintos objetos guiados por su olfato.
• Cuidar su cama: es evidente que la cama del perro debe ser cómoda y más cálida o más fresca, dependiendo de la estación del año. Pero también hay que controlar la estancia en la que se encuentra, que debe ser tranquila, silenciosa y mantenerse a oscuras, es decir, como ya hemos señalado, no podemos instalar la cama en un lugar lleno de estímulos fuertes. Además, debe estar a una temperatura estable y alejada de corrientes de aire.
• Establecer rutinas: los perros son animales de costumbres, que necesitan unos horarios fijos para su previsibilidad. Esto implica que deben realizar sus actividades rutinarias, como pasear, comer y, por supuesto, dormir, a horas similares, lo que ayuda a que establezcan la diferencia entre sus periodos de actividad y los de descanso. Relacionado con los paseos, puede que te interese conocer "Cuándo puede salir un cachorro a la calle".
• Ofrecer una alimentación de calidad: nos referimos a una dieta completa y equilibrada que cubra las necesidades nutricionales de cada ejemplar en función de su momento vital. Una alimentación de estas características previene problemas de salud que pueden interferir en el sueño. También conviene darla en una o varias raciones y no olvidar dejar siempre al alcance del perro agua limpia y fresca.
• Confiar en el veterinario: como hemos explicado en cada apartado, si vemos que nuestro perro no consigue descansar bien, es fundamental que contactemos con su veterinario, pues podría estar padeciendo alguno de los problemas de salud, a nivel físico o mental, que hemos mencionado. Los trastornos a nivel psicológico debe tratarlos un etólogo, que es el especialista en comportamiento animal.

Este artículo es meramente informativo, en TodoPerros.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu gato a un centro veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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