- 09 Jul 2007, 16:38
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Es algo grosero por mi parte, pero os diré que conozco a dos compañeros suyos de camada que ni de lejos tiene el aspecto y salud del mío: francamente "viejos", gordos y con un pelo estropeado. Ahora, sé que siempre han comido piensos de esos "del supermercado". Quizá no quiera decir nada, pero yo creo que algo tendrá que ver. Mi chucho está igual ahora, con doce años, que cuando tenía tres, lo prometo.
Te cuento desde mi experiencia: le di Nutro cordero y arroz a mi perro durante años; pero ya con diez u once años pensé que era buen momento de pasar a un senior. Seguí con Nutro, pero Senior, y la cosa no me fue muy bien; según me han dicho algunas personas entendidas, el pienso lamb and rice de Nutro es estupendo, con una formulación muy buena, pero la variedad senior no tanto. Me decidí, después de pensarlo bastante, por Acana Orijen, en formulación senior también, y la verdad es que estoy encantado. Mi perro tiene doce años y está de maravilla, y no es apreciación subjetiva mía: le he hecho una revisión completa hace una semana (análisis de sangre incluido) y la veterinaria está alucinada de cómo está. Me gustaría remarcar que soy un firme convencido de que, problemas genéticos aparte, la salud de un perro depende de lo que come; el mío ha comido piensos de calidad siempre (más algún caprichillo o suplemento de vez en cuando) y nunca ha tenido ningún problema ni digestivo, ni obesidades, ni nada de nada. En doce años sólo he ido al veterinario a vacunarle y poco más. Por si sirve a alguien, diré que los piensos que he utilizado en estos doce años fueron Eagle Pack, Nutro primero en una variedad de pollo y después lamb and rice durante muchos años y ahora Orijen.
Es algo grosero por mi parte, pero os diré que conozco a dos compañeros suyos de camada que ni de lejos tiene el aspecto y salud del mío: francamente "viejos", gordos y con un pelo estropeado. Ahora, sé que siempre han comido piensos de esos "del supermercado". Quizá no quiera decir nada, pero yo creo que algo tendrá que ver. Mi chucho está igual ahora, con doce años, que cuando tenía tres, lo prometo.