- 05 Ene 2009, 11:55
#8890843
Hoy hace exactamente 9 meses que mi Gilda sufrió un infarto medular, perdió la mobilidad de la pata trasera derecha en su totalidad y parte de la delantera derecha, incluso el ojito derecho se le cerró un poco y el rabito se le torció. Fué todo derepente, en 24horas a Gilda le hicieron una resonancia magnética y una mielografía que fué lo que confirmó la triste noticia, Gilda había sufrido un infarto medular. Os podéis hacer una idea de cómo me sentí cuando me lo dijeron, la solución que tenía era esperar y tener mucha paciencia, las 72 horas siguientes eran decisivas en mi niña y tenía que ser fuerte y hacer por mantenerse al menos en pie porque si no quedaría asi.
Le suministraron corticoides vía oral y le sentaron fatal, así que cada dos días tenía que llevarla a que se lo inyectaran. Al principio Gilda no se mantenía en pie, cuando la sacaba a hacer pis la tenia que sujetar yo pero con lo pequeñita que es sacó todas sus fuerzas y recuerdo que cuando llegaba de trabajar antes de entrar en casa ya la oía ladrar y al abrir la puerta venía como podia a saludarme, es un encanto.
Poco a poco recuperó mucha mobilidad, el ojo se le abrió del todo y la pata delantera esta perfecta, donde no recuperó toda la sensibilidad fué en la trasera así que le quedó un ligero cojeo pero corre y juega como antes, jamás pensé que volvería a verla así de feliz.
Ella está bien pero yo desde entonces tengo un miedo espantoso de que le vuelva a suceder.
Quería compartirlo con vosotros/as y ayudar a gente que le haya sucedido algo así o que esté pasando por ello.
Muchas gracias por leerme.
Gildorrona.
Hola a todos/as, soy nueva en el foro. He decidido entrar porque aunque encuentro mucho consuelo en la gente de mi entorno sé que todos vosotros/as sabreís lo que se siente cuando uno de nuestros pequeños enferma.
Hoy hace exactamente 9 meses que mi Gilda sufrió un infarto medular, perdió la mobilidad de la pata trasera derecha en su totalidad y parte de la delantera derecha, incluso el ojito derecho se le cerró un poco y el rabito se le torció. Fué todo derepente, en 24horas a Gilda le hicieron una resonancia magnética y una mielografía que fué lo que confirmó la triste noticia, Gilda había sufrido un infarto medular. Os podéis hacer una idea de cómo me sentí cuando me lo dijeron, la solución que tenía era esperar y tener mucha paciencia, las 72 horas siguientes eran decisivas en mi niña y tenía que ser fuerte y hacer por mantenerse al menos en pie porque si no quedaría asi.
Le suministraron corticoides vía oral y le sentaron fatal, así que cada dos días tenía que llevarla a que se lo inyectaran. Al principio Gilda no se mantenía en pie, cuando la sacaba a hacer pis la tenia que sujetar yo pero con lo pequeñita que es sacó todas sus fuerzas y recuerdo que cuando llegaba de trabajar antes de entrar en casa ya la oía ladrar y al abrir la puerta venía como podia a saludarme, es un encanto.
Poco a poco recuperó mucha mobilidad, el ojo se le abrió del todo y la pata delantera esta perfecta, donde no recuperó toda la sensibilidad fué en la trasera así que le quedó un ligero cojeo pero corre y juega como antes, jamás pensé que volvería a verla así de feliz.
Ella está bien pero yo desde entonces tengo un miedo espantoso de que le vuelva a suceder.
Quería compartirlo con vosotros/as y ayudar a gente que le haya sucedido algo así o que esté pasando por ello.
Muchas gracias por leerme.
Gildorrona.